Bogotá D.C., Noviembre 20 de 2023
Redacción: Disruptiva
Fotografía: JEP
La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ha emitido un fallo crucial declarando como no amnistiables los crímenes de homicidio agravado, tentativa de homicidio agravado y lesiones personales perpetrados en 2006 contra 9 concejales en Rivera, Huila. Estos delitos están relacionados con la condena de un exintegrante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP).
La determinación de la JEP resalta la naturaleza de las conductas no amnistiables, vinculadas a serias violaciones de los Derechos Humanos o infracciones al Derecho Internacional Humanitario. Estos actos de extrema gravedad están fuera del alcance de amnistías o indultos, exigiendo la investigación, el juicio y la sanción de los responsables por parte del Estado.
El caso específico que involucra a este excombatiente de las FARC-EP será derivado a la Sala de Reconocimiento para su investigación dentro del #Caso10. Esta instancia se enfoca en los crímenes no amnistiables cometidos por miembros de la extinta guerrilla, abriendo una nueva etapa en el proceso de justicia transicional.
¿Qué implica una conducta no amnistiable?
La JEP explica que las conductas no amnistiables se refieren a acciones que constituyen graves violaciones a los Derechos Humanos o transgresiones al Derecho Internacional Humanitario. Estos actos atroces no pueden ser objeto de amnistía o indulto, estableciendo así la responsabilidad del Estado en la investigación, juzgamiento y sanción de los culpables.
La declaración de la JEP subraya la importancia de la justicia y la rendición de cuentas en la construcción de la paz y la reconciliación en Colombia. La imposibilidad de amnistiar delitos de tal gravedad refuerza el compromiso con la reparación a las víctimas y el esclarecimiento de hechos que marcaron profundamente la historia del país.
El impacto en la comunidad
Los asesinatos de los 9 concejales de Rivera, Huila, en 2006, fueron un duro golpe para la comunidad. Los concejales eran líderes sociales comprometidos con el desarrollo de su municipio y su muerte dejó un vacío importante en la vida política y social de la región.
Los asesinatos también provocaron un clima de miedo y desconfianza en la comunidad. Muchas personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares por temor a ser víctimas de represalias.
Avance hacia la verdad y la justicia
El enfoque de la JEP en el #Caso10 representa un paso significativo hacia la verdad y la justicia en el marco del proceso de paz. La investigación y el juzgamiento de crímenes no amnistiables, aunque desafiantes, son fundamentales para la consolidación de la paz sostenible en Colombia.
La decisión de la JEP de no amnistiar estos crímenes específicos contra concejales en Rivera, Huila, resalta el compromiso continuo con la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición. Asimismo, enfatiza la importancia de asegurar que los responsables rindan cuentas por sus acciones, promoviendo así un país basado en el respeto por los derechos fundamentales de todos sus ciudadanos.
El proceso en curso en la JEP demuestra la aplicación rigurosa de los principios de justicia transicional para abordar crímenes graves cometidos durante el conflicto armado, sentando las bases para una sociedad colombiana más justa y reconciliada.
