África. Septiembre 16 de 2023.
Redacción: Disruptiva
Fotografía: Peter Hermes Furian
Una alianza militar histórica en el Sahel
Tres naciones africanas, Níger, Malí y Burkina Faso, han tomado una decisión audaz y sin precedentes. En medio de la creciente amenaza del terrorismo y el crimen organizado en la región del Sahel, han forjado una alianza militar defensiva, la Alianza de Estados del Sahel (AES). Este pacto, revelado por el presidente interino de Malí, el coronel Assimi Goita, en las redes sociales, marca un hito en la lucha contra la inestabilidad en la región.
Objetivos de la Alianza del Sahel
La Alianza de Estados del Sahel tiene un objetivo claro: establecer una arquitectura de defensa colectiva y apoyo mutuo entre las partes firmantes. Los tres países, todos gobernados por líderes militares que llegaron al poder tras golpes de Estado recientes, están decididos a enfrentar las crecientes amenazas en la región.
Compromiso contra el terrorismo y la agresión
Este histórico acuerdo compromete a las partes a unirse en la lucha contra el terrorismo y el crimen organizado. Lo más notable es que establece que cualquier violación de la soberanía y la integridad territorial de uno o más de los países firmantes se considerará una agresión contra todas las partes. Esto incluso podría llevar al uso de la fuerza en defensa mutua.
Luchando contra la inestabilidad en el Sahel
Durante años, estos tres países han estado combatiendo a grupos armados islamistas, que han ganado terreno y control territorial en la región del Sahel. Esta inestabilidad contribuyó a los golpes de Estado que tuvieron lugar en Níger en julio, en Malí en 2021 y en Burkina Faso en 2022. La Alianza del Sahel representa un esfuerzo conjunto para abordar esta crisis regional.
Un giro geopolítico notable
Además de su compromiso de seguridad, los tres países también han dado un giro geopolítico importante al alejarse de su antigua potencia colonial, Francia, que solía ser su principal suministrador de ayuda militar. Malí, por ejemplo, ha buscado colaborar con el grupo Wagner ruso, marcando un cambio significativo en la política exterior de la región.
Un futuro incierto
La Alianza de Estados del Sahel plantea preguntas sobre cómo esta colaboración militar conjunta influirá en el panorama político y de seguridad en África occidental. En medio de la lucha contra el terrorismo y el desafío a la influencia extranjera, estos tres países enfrentan un futuro incierto, pero están decididos a trabajar juntos para abordar los desafíos que se les presenten.
Esta alianza marca un hito en la búsqueda de soluciones regionales a los problemas que enfrenta el Sahel, y su impacto en la región será seguido de cerca en los próximos años.
